A LAS ENTIDADES FINANCIERAS:

Nos dirigimos a Uds. con relación al tema de la referencia, a efectos de complementar y aclarar lo establecido en la Comunicación "A" 2654.

Impacto del año 2000 en los clientes

1. Consideraciones generales.

Las prácticas internacionales aconsejan la implementación de metodologías para evaluar el riesgo de los clientes, por lo que resulta necesario acompañar este proceso con el desarrollo de los aspectos más relevantes para cumplir ese objetivo.

En el Anexo I a la Comunicación "A" 2654, punto 2.6.c. "Interrelaciones externas con la entidad -proyecto año 2000 de empresas clientes", se dispone que las entidades financieras deben instrumentar procesos para verificar periódicamente los esfuerzos que realizan sus clientes sobre la adecuación a la "problemática del año 2000", como así también que deberán tener en cuenta este tema en el análisis de riesgo crediticio.

Nos referimos a desarrollar metodologías de evaluación de riesgos de sus clientes con dependencia de sistemas y tecnologías informáticas, como así también de tecnologías asociadas (maquinarias o elementos con "chips" incorporados).

La metodología debe centrarse en la evaluación de los esfuerzos de los clientes antes referidos, para solucionar los efectos de la "problemática del año 2000" y determinar sus riesgos potenciales.

2. Consideraciones especiales.

A continuación, para mayor ilustración, se describen algunas consideraciones que pueden permitir a las entidades financieras evaluar los riesgos que surgen de la falla o de la incapacidad de los clientes en tratar esta problemática.

Los problemas pueden resultar de la falla en proporcionar una adecuada solución a los sistemas, tecnologías informáticas y tecnologías asociadas del cliente, sus proveedores y sus clientes.

2.1. Lineamientos para el control general de riesgos.

Las entidades financieras deben haber establecido una metodología para manejar los riesgos que presentan sus clientes por el año 2000, la que debería incluir:

— identificar a los clientes críticos.

— identificar a los clientes dependientes de tecnologías.

— evaluar su estado de preparación para el año 2000.

— evaluar el riesgo para la entidad.

— implementar los controles o medidas apropiadas para manejar y disminuir dichos riesgos.

La evaluación de los clientes en forma individual, en cuanto al riesgo y al impacto que el año 2000 tendrá sobre la entidad, debería estar concluyendo el 30 de septiembre de 1999.

Los temas relacionados con el intercambio de datos de la entidad con sus clientes debe ser tratado como una parte del gerenciamiento interno del proyecto del año 2000 de cada entidad.

El riesgo de exposición de los distintos tipos de clientes dependerá de:

— la magnitud y variedad de operaciones que mantienen con la entidad.

— su calificación de riesgo crediticio.

— la complejidad de sus sistemas, tecnología de información y tecnologías asociadas.

— su dependencia de la tecnología para el éxito de sus negocios.

— su dependencia de terceros proveedores de productos y servicios.

— el volumen de las operaciones de los proveedores de fondos.

A fin de asegurar información consistente para el análisis de riesgo, las entidades financieras deben tratar de:

— entrenar a funcionarios responsables o contratar a empresas especializadas para que realicen una evaluación del riesgo de sus clientes.

— desarrollar una serie de preguntas estándares para evaluar el alcance de los esfuerzos de un cliente sobre el año 2000.

— actualizar periódicamente el estado de los esfuerzos realizados por los clientes.

— documentar y archivar en las carpetas de los clientes las conclusiones de las evaluaciones.

Las entidades financieras podrán encontrar beneficioso unir esfuerzos para coordinar tareas que permitan obtener información acerca de sus clientes comunes.

2.2. Otorgamiento de financiaciones.

Durante los procesos de asistencia financiera por montos considerados relevantes, a estos fines, por las entidades, éstas deben evaluar la exposición de riesgo del año 2000 de los deudores.

Deberán asegurarse que los funcionarios afectados a esta tarea estén entrenados apropiadamente y tengan el conocimiento suficiente para realizar una evaluación adecuada del riesgo del cliente con relación a este tema.

2.3. Documentación.

La apropiada documentación de las distintas carteras de préstamos proporciona un medio efectivo para monitorear y manejar el riesgo presentado por los deudores.

Esta documentación debe reflejar algunos o todos los siguientes puntos en los acuerdos de préstamos:

— declaraciones de los deudores de que cuentan con los proyectos adecuados de solución a la "problemática del año 2000" y que lograrán la compatibilidad durante 1999.

— una evaluación conducida por una tercera parte sobre los esfuerzos del deudor por la solución de esta problemática.

— las garantías de que el deudor cumplirá con su plan "año 2000".

— acuerdos asegurando que están comprometidos los recursos adecuados para completar el plan "año 2000".

— cláusulas predeterminadas que permitan a la entidad adelantar el vencimiento de la deuda por incumplimiento de los acuerdos relacionados con la problemática del año 2000.

2.4. Colocadores de fondos

Se debe considerar el efecto potencial sobre la liquidez de la entidad, mediante la evaluación de las posibles reducciones en la disponibilidad de fondos de importante colocadores, que no hayan tomado apropiadas medidas para manejar sus propios problemas con relación al año 2000. Las entidades deben desarrollar estrategias apropiadas y planes de contingencias para tratar este problema, a fin de contar con fuentes alternativas de fondos.

Como con los tomadores de fondos, las entidades deben discutir los temas del año 2000 con sus más importantes colocadores de fondos y evaluar lo más extensamente posible los riesgos potenciales.

Las entidades deben ser conscientes de las concentraciones (incluyendo concentraciones en una sola moneda) de un inversor individual o grupos de inversores que no pudieran lograr su compatibilidad con el año 2000.

2.5. Contrapartes que operan en los mercados de capitales y otros activos.

Los controles de riesgo que debe focalizar una entidad expuesta a los problemas relacionados con la "problemática del año 2000" en mercados de capitales y entre las contrapartes, se asemejan a aquellos necesitados respecto de los tomadores y colocadores de fondos. Los problemas potenciales relacionados con el año 2000 con los participantes del mercado de capitales, van desde una falla de la contraparte para completar las garantías de una transacción o las derivaciones de la cancelación del contrato establecido a, en casos extremos, la falla de la contraparte en sí misma.

La falla de una contraparte puede llevar a una pérdida total del monto del pago o contrato, o bien puede causar a la entidad problemas inesperados de liquidez, los cuales a su tiempo, pueden resultar en la falla de la propia entidad financiera para entregar dólares u otras monedas a sus contrapartes.

Además, los problemas relacionados con el año 2000 dentro de las contrapartes fiduciarias pueden impedir a una entidad financiera el cumplimiento con sus responsabilidades para proteger y manejar los activos para los beneficiarios fiduciarios. Una falla en la contraparte para remitir los pagos de los bonos o establecer transacciones de garantías, puede incrementar el riesgo.

Como parte de un proceso adecuado de gerenciamiento, las entidades deberán identificar y discutir los temas de compatibilidad del año 2000 con aquellas contrapartes que representan una gran exposición para la entidad en sí misma y para los beneficiarios de cuentas fiduciarias. Las entidades financieras deben evaluar la exposición de la contraparte y desarrollar planes de acción de reducción de riesgos.

En los casos en que las entidades no estén completamente satisfechas con sus contrapartes en cuanto al cumplimiento del año 2000, deben establecer controles que limiten tales riesgos como, por ejemplo, la terminación anticipada de acuerdos, exigir garantías adicionales, acuerdos de neteo/compensación de pago, o garantías de terceros.

En los casos en los cuales la entidad tiene un alto grado de incertidumbre sobre la habilidad de la contraparte para tratar los problemas del año 2000, la entidad debe considerar evitar las transacciones con un riesgo de liquidación después del 1º de enero del 2000.

Los anexos que se acompañan proporcionan ejemplos de cuestionarios que utilizan entidades financieras a nivel internacional para manejar el riesgo del cliente con relación a esta problemática.

El uso de estos formularios no es obligatorio, no obstante, ellos proporcionan ejemplos útiles de los métodos utilizados para evaluar la preparación de los clientes.

ANEXOS

ANEXO A

e. 5/8 N° 286.964 v. 5/8/99