290. DISTRIBUCION DEL TAMAÑO DE PARTICULA EN POLVOS

El tamizado es el método generalmente empleado para determinar la granulometría de los polvos de uso farmacéutico. Es particularmente útil cuando la mayoría de las partículas son mayores de 100 mm.

Los tamices se fabrican preferentemente de acero inoxidable, bronce u otro material inerte. Constan de una malla de alambre tejido, con hilos simples y de aberturas cuadradas o casi cuadradas, la cual se fija a la base de un cilindro abierto.

La granulometría de los polvos se caracteriza en términos descriptivos, según la abertura nominal del tamiz por donde pasa dicho polvo. De esta manera se reconocen los siguientes tipos de polvos:

Polvo grueso - No menos de 100% pasa a través de un tamiz N° 1,7 y no más de 40% pasa a través de un tamiz N° 355.

Polvo moderadamente grueso - No menos de 100% pasa a través de un tamiz N° 710 y no más de 40% pasa a través de un tamiz N° 250.

Polvo moderadamente fino - No menos de 95% pasa a través de un tamiz N° 355 y no más de 40% pasa a través de un tamiz N° 180.

Polvo fino - No menos de 95% pasa a través de un tamiz N° 180 y no más de 40% pasa a través de un tamiz N° 125.

Polvo muy fino - No menos de 95% pasa a través de un tamiz N° 125 y no más de 40% pasa a través de un tamiz N° 90.

Las denominaciones empleadas para los tamices se detallan en la Tabla junto con la abertura nominal de cada uno. Como regla general en esta Farmacopea se emplea la denominación recomendada por la norma ISO 3310-1990.

Método de tamizado

El método analítico consiste en colocar los tamices, indicados en la Tabla, uno sobre otro en orden creciente de abertura y luego transferir la muestra al tamiz superior. El conjunto de tamices se agita mediante un dispositivo mecánico que pueda impartir a los tamices ya sea un movimiento rotatorio con golpes de asentamiento (de 200 a 300 revoluciones horizontales y con 150 a 200 golpes de asentamiento por minuto) o un movimiento vibratorio (1 a 2 mm de amplitud), a menos que se especifique de otro modo en la monografía correspondiente. Luego se determina el peso del material retenido en cada tamiz. Los resultados se expresan en porcentaje de peso de polvo en cada uno de los intervalos determinados por el tamaño de abertura de los tamices.

Polvos gruesos y moderadamente gruesos: colocar de 25 a 100 g de muestra sobre un tamiz, normatizado. Agitar durante no menos de 20 minutos o hasta completar el pasaje del polvo Determinar el peso de la muestra que atravesó la malla y el peso de la muestra remanente en el tamiz.

Polvos moderadamente finos, finos o muy finos: proceder según se indica en Polvos gruesos y moderadamente gruesos empleando cantidades que no excedan los 25 g y agitando no menos de 30 minutos.

Para los polvos que tiendan a obturar las aberturas del tamiz cepillar cuidadosamente las mismas periódicamente durante el ensayo.

*ASTM E 11 US: American Society for Testing and Materials Specification E 11 U.S. Standard Sieve Series.